Viajar a Asturias es encontrarse con la buena mesa y Ribadesella es un ejemplo de magnífica gastronomía.
De ello dan cuenta los fogones que se afanan en crear cartas a base de productos del mar, y de la tierra. Porque Ribadesella marida lo mejor de ambos medios, para rendir homenaje al territorio en que se enclava.
Son frecuentes las jornadas gastronómicas en diferentes épocas del año, que pretenden ensalzar los valores de aquellos alimentos de temporada y combinar la cocina tradicional con platos creativos.
Las Jornadas Gastronómicas del Mar (junio), las del Arcín y la Sidra (febrero), el Campeonato de Pinchos (octubre) se celebran en varios restaurantes del concejo, tanto de la villa como de las aldeas. En todas las citas convive la cocina tradicional con los platos más creativos que idean para la ocasión los cocineros locales.
Ribadesella es la cuna de un cocinero con Estrella Michelín, Jaime Uz; y de uno de los mejores arroceros de España, Bruno Méndez, en cuya cocina se hacen, además, unas de las mejores croquetas del mundo, así lo ratificaron en la edición Madrid Fusión 2016. La hostelería de Ribadesella cuenta también con varios Soles Repsol (La Huertona y GüeyuMar); tiene el mejor restaurante de playa ,reconocido como tal en Madrid Fusión 2014, GüeyuMar; y ocho de sus establecimientos han sido distinguidos con un sello de calidad por la Cofradía de Pescadores Virgen de la Guía de Ribadesella como garantía de los mejores productos. Varios restaurantes riosellanos son recomendados en la mejores guías gastronómicas.
No faltan las sidrerías con olor a Asturias y no hay restaurante que no esté especializado en el pescado del Cantábrico. Las carnes, rojas en su mayoría, son a menudo los platos estrella de distintas parrillas y establecimientos.